Regenerar tejidos periodontales de forma acelerada es uno de los objetivos de muchas terapias odontológicas. Es muy útil en pacientes con hueso insuficiente para albergar un implante dental o con problemas para coagular.

Aun así, la regeneración mediante plasma no se realiza solo en personas que presentas dificultades para soportar determinados tratamientos, sino que cada vez más se usa en todo tipo de pacientes con el objetivo de facilitar su recuperación. Además, es un tipo de técnica que también se usa en tratamientos estéticos y deportivos.

Las ventajas de introducir la centrifugadora en tu clínica odontológica son muchas. Entre ellas destacan:

  • Los tiempos de recuperación se acortan mucho.
  • No hay riesgos de rechazo ya que el plasma se extrae del mismo paciente.
  • Se puede usar una centrifugadora en muchos tipos de intervenciones, como cirugías, implantes con personas que han perdido mucho hueso o muelas del juicio complicadas.
  • Dan un prestigio extra a la clínica dental, ya que los pacientes terminan más satisfechos.

Las dos técnicas para obtener plasma

Existen dos formas de obtener plasma para regenerar tejidos: el PRP (Plasma Rico en Plaquetas) y el PRF (Plasma Rico en Fibrina), con y sin leucocitos, respectivamente.

En el PRP se requiere la utilización de aditivos y doble centrifugado, mientras que en el caso del PRF se puede obtener el plasma con un solo centrifugado de unos 13 minutos, que además será suturable.

También existen diferencias en el tiempo que se deshacen los factores de crecimiento in vitro dentro de la herida ya que, mientras que en el PRP se suelen deshacer en unas 4 horas, el PRF logra mantenerlo unos 7 días, beneficiándose mucho más de las propiedades regenerativas.

La doctora Paola Delgado, especialista clínico de Incotrading, lo detalla en el siguiente vídeo:

Centrífuga Medifuge de Silfradent

La centrifugadora Medifuge, de la prestigiosa marca Silfradent, es un aparato que ha revolucionado el mundo de la regeneración autóloga.

Medifuge es una centrifugadora con capacidad para 8 tubos y clasificación 2A, de manera que puede ser usada incluso en quirófanos. En 12 minutos y un solo paso permite obtener PRF (Plasma Rico en Fibrina) listo para ser aplicado en el paciente.

Está fabricada con materiales antitérmicos, antiestáticos y antimagnéticos. Tanto los portatubos como el rotor pueden extraerse para ser esterilizados. También tiene un sistema de descontaminación interno.

En el International Dental Show (IDS) de 2019, la Centrífuga Medifuge de Silfradent fue una de las grandes protagonistas y desde Tecnología para la Salud aprovechamos para grabar un pequeño vídeo que muestra su funcionamiento: