Fotografía dental: Consejos para todos sus usos
Las fotografías dentales son un recurso muy común y beneficioso para las clínicas. Por un lado, permiten al odontólogo documentar su labor y comunicarse con el laboratorio, el resto de compañeros o los pacientes, aportando un valor extra en el diagnóstico y el seguimiento de tratamientos. Y son esenciales como recursos de referencia en congresos y charlas. Por otro lado, son casi imprescindibles en la publicidad de la clínica dental, ya sea en Internet, en carteles o en revistas.
Gracias a los avances tecnológicos de las cámaras o los smartphones, lograr fotografías dentales de alta calidad está al alcance de todos. Además, teniendo en cuenta algunos consejos y técnicas que repasaremos en este artículo, las imágenes que captes todavía serán más eficaces.
Fotografía dental para finalidades clínicas
La Academia Americana de Odontología Cosmética es una gran referencia para aprender sobre fotografía dental, ya que han publicado una serie de guías que profundizan en cada detalle a tener en cuenta. Una de las prácticas que recomienda la Academia es realizar siempre 12 fotografías en el preoperatorio, desde distintos puntos de vista, y 12 más en el postoperatorio. Esto ayudará, tanto al profesional como al paciente, a ver el antes y el después.
Las fotografías pueden ser extraorales e intraorales y deben tenerse distintas consideraciones a la hora de realizarlas:
Fotografías extraorales
Las imágenes extraorales se deben realizar a modo de retrato, de manera que el paciente sonreirá de forma natural y habrá que tomar fotos frontales, laterales y en un ángulo de 45 grados.
Gracias a ellas, los expertos pueden ver si el tipo de mordida afecta a la morfología de la cara. Es importante que aparezca toda la cara o gran parte de ella en la foto, ya que el objetivo es captar los rasgos y las características faciales junto con la sonrisa del paciente, de manera que se pueda valorar el cambio facial en conjunto una vez finalizado el tratamiento. Algunas de las especialidades en las que se suelen usar más son en ortodoncia, rehabilitaciones completas e implantología.
Este tipo de fotografías no requieren una técnica tan compleja como las intraorales, ya que no necesitan herramientas específicas para realizarlas. Con una cámara o incluso un smartphone, que cuente con una cámara con buenas prestaciones, será suficiente.
Fotografías intraorales
En las fotografías intraorales solo se ve la cavidad oral, sin mostrarse los labios. Se trata de un tipo de imagen utilizada en todas las especialidades de odontología, tanto al inicio del tratamiento, como en los pasos intermedios y para registrar el resultado final. Además, sirve como complemento a otro tipo de estudios por imagen, como los escáneres 3D que realiza la Veraview X800.
Para lograr unas imágenes claras, con el menor ruido posible y con unos colores fieles a la realidad es necesario contar con una cámara con flash que permita realizar ampliaciones manteniendo la calidad de imagen. Se recomienda el uso de un teleobjetivo medio, diafragmas cerrados (a partir de f/8) y el ISO más bajo posible. Un buen truco para que la fotografía salga bien cuando se realiza de manera frontal es enfocar los incisivos laterales o los caninos.
En algunas ocasiones, especialmente cuando la atención de la imagen se quiere centrar en la dentadura superior o inferior, es interesante usar un plástico negro esterilizado que tape la lengua y el resto de cavidad bucal. Casi como si se tratara de un fondo de estudio fotográfico.
Otras herramientas odontológicas como los separadores o retractores de mejillas son de mucha ayuda para poder realizar las fotografías intraorales.
Fotografía dental para marketing
Otra finalidad de la fotografía dental es su uso para campañas publicitarias. La imagen de una sonrisa perfecta sigue siendo un gran reclamo para lograr pacientes y siempre dará más confianza si se hace en la propia clínica, en lugar de comprarla en un banco de imágenes.
Las fotografías dentales también pueden nutrir de contenido tus redes sociales, aunque según la red social en la que vayas a publicarlas tendrán que tener unas características u otras. En el caso de Linkedin, que es una plataforma profesional se pueden usar fotografías dentales para representar el paso a paso de un tratamiento que te permita posicionarte entre tus colegas de profesión. Sin embargo, en Instagram, tendrás que publicar imágenes más dirigidas a atraer la atención de clientes, mostrando por ejemplo que realizas implantes u ortodoncias muy poco visibles.
Cuando se realizan estas fotografías con una mera finalidad publicitaria es habitual usar Photoshop para eliminar manchas o corregir la luz, algo que no hay que hacer nunca cuando la imagen sirva para fines médicos.