Los implantes dentales son, por ahora, la mejor solución a la falta de estabilidad y funcionalidad de los dientes. Además, también ofrecen una imagen sana y bonita de la boca para toda la vida.

Por eso, una de las preguntas más frecuentes que hacen las personas que tienen que extraerse un diente, es si existe la posibilidad de colocar implantes de forma inmediata.

Hasta hace pocos años, era necesario esperar unos meses después de extraer el diente para colocar los implantes dentales y, una vez colocados, el paciente tenía que esperar un tiempo prudencial más para poder disponer de sus dientes fijos.

Hasta hace poco, también, existía un protocolo de implante inmediato que se reservaba sólo para situaciones muy favorables, como por ejemplo, en aquellos casos en los que el implante tenía mucha estabilidad y no hacía falta una intervención con injerto de hueso.

Así, una vez completado el proceso de este protocolo, el principal riesgo que se tenía que evitar era la aparición de la llamada periimplantitis, una infección similar a la periodontitis (más conocida como piorrea) que afecta al tejido que rodea a los dientes.

Sin embargo, en la actualidad, gracias a las mejoras tecnológicas que han surgido en el sector de la implantología, hay tratamientos mínimamente invasivos que utilizan la cirugía guiada por ordenador. Esta técnica permite al paciente salir de la consulta con una prótesis dental el mismo día de la intervención.

Puedes leer más sobre las ventajas de la tecnología 3D en implantes dentales aquí: ‘La tecnología 3D revoluciona los implantes dentales’ (enlace).

 

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Navident, dientes en un día

Los avances tecnológicos se han traducido en ventajas dentro del sector odontológico. La irrupción de la técnica de navegación dinámica por ordenador que ofrece Navident, permite observar el maxilar y la encía del paciente a través de imágenes reales en 3D. De esta manera, el profesional planifica dónde colocará los implantes, evitando los problemas que le puedan surgir en el momento de la intervención.

Así, las fases a seguir en cirugía guiada por ordenador son, primero de todo, tener que hacer una tomografía axial computerizada (TAC) al paciente. A continuación, la TAC proporciona toda la información anatómica y necesaria de la boca. Seguidamente, esta información se procesa y se traduce en una especie de mapa de la zona que el especialista analiza y utiliza como guía para planificar la intervención.

Esta guía dinámica en 3D, pues, posibilita navegar por el maxilar y la mandíbula del paciente para precisar la posición exacta del implante. Además, este sistema, utiliza un tipo de cirugía mínimamente invasiva que evita tener que abrir la encía en la fase de colocación de cada implante.

(Ver más sobre este aspecto en este artículo: ‘Implantes dentales menos traumáticos con cirugía guiada’).

Esto es posible gracias a las imágenes tridimensionales que se muestran previamente en el ordenador. Así, el profesional coloca el implante minimizando riesgos y consiguiendo resultados óptimos y más rápidos.

De este modo, este sistema de navegación dinámica te permite planificar todo el tratamiento, obtener una visión real del maxilar y la mandíbula del paciente, introducir en el ordenador todos los detalles de la intervención y localizar el punto exacto y virtual de los implantes con anterioridad a la fase de intervención quirúrgica.

Esta revolución en la implantología hace posible que el paciente salga con la prótesis definitiva de los implantes el mismo día de la intervención porque el profesional coloca el diente definitivo al paciente en una sola sesión. El proceso es mucho más rápido que el uso de técnicas de implantes convencionales y causa menos molestias a los pacientes porque ninguna fase de la intervención queda supeditada a la improvisación.

El especialista realiza una cirugía mínimamente invasiva que no requiere tener que levantar la encía. Por eso, en un solo día, el paciente ya tiene puestos sus implantes con un postopertorio más rápido y menos traumático y doloroso.

Esta técnica elimina, pues, esos plazos de espera largos que causaban tantas molestias a los pacientes. La posibilidad de tener una nueva pieza dental al momento y sin necesidad de someterse a varias intervenciones se convierte en una opción muy atractiva, no sólo para los pacientes, si no también, para los propios profesionales que evitan el rechazo que muchos pacientes muestran ante la necesidad de llevar implantes provisionales. Un rechazo que, en ocasiones, provoca el abandono del tratamiento.

Además del ahorro, tanto de tiempo como de intervenciones, una de las grandes ventajas de esta técnica guiada por ordenador es que elimina los efectos secundarios que pueden causar las prótesis provisionales, como por ejemplo, la reabsorción del hueso que soporta el implante o la variación en la forma de la encía. Este sistema guiado dinámico da la opción de corregir cualquier problema que surja en el momento, antes de implantar la prótesis definitiva.

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Vemos como, a través de este sistema de navegación dinámico, la colocación del implante se puede convertir en un procedimiento realmente simple y sencillo. Como consecuencia, aumenta la satisfacción del paciente y asegura su comodidad ante el tratamiento de implantes dentales.

La cirugía guiada por ordenador, además, permite cumplir con las expectativas y necesidades estéticas y funcionales del paciente, de una forma muchísimo más efectiva y con unos resultados más apreciados.

En definitiva, a la hora de restaurar la sonrisa, este sistema de navegación dinámico, simplifica el proceso y hace que el tratamiento se acorte, lo que resulta muy apreciado y tranquilizador para aquellos pacientes que tienen fobia al dentista, ansiedad o nerviosismo ante este tipo de tratamientos.

Como ves, recuperar la salud y la estética bucodental sin miedo, sin dolor y en menos visitas, ya es posible.