El número de dentistas colegiados en España sube año tras año, reflejando una destacada subida del 30% en menos de 15 años. Una de las muchas lecturas que se pueden sacar de esta situación es que actualmente resulta todavía más complicado conseguir que tu clínica dental destaque por encima de la competencia.

Los avances tecnológicos marcan el ritmo de la profesión y, en la actualidad, las clínicas dentales se ven con la necesidad de adaptarse a ellos para ofrecer tratamientos cada vez más seguros, indoloros, rápidos y de calidad. Asimismo, los pacientes se están volviendo más exigentes y si su clínica dental no ofrece ese tipo de soluciones, posiblemente buscará una alternativa.

Para no perder el hilo de esa evolución en la que el sector de la odontología está inmerso vamos a poner el foco en el presente y en el futuro próximo, de manera que estés al día de las últimas tendencias.

El láser como presente y futuro de la odontología

El láser ya ha entrado en el sector de la odontología mediante aparatos de última tecnología, aunque actualmente todavía son muchas las clínicas dentales que no han dado el paso de sustituirlo por sus herramientas tradicionales.

El láser dental permite realizar intervenciones mínimamente invasivas, eliminando la necesidad de inyectar la anestesia y consiguiendo postoperatorios mucho más satisfactorios. Su capacidad ablativa y regeneradora también permite intervenir con precisión y reducir mucho el sangrado. Todo ello reduce el tiempo y facilita la intervención de los profesionales, a la vez que deja mucho más satisfecho al paciente.

Un ejemplo de láser dental que marcará el presente y el futuro de las clínicas es el Wiser de Doctor Smile. Se trata de un láser que puede transformar tu clínica por sí solo, ya que tiene aplicaciones en endodoncia, periodoncia, cirugía, implantología, terapia o cosmética.

La Inteligencia Artificial para transformar la odontología

Otra de las áreas por las que pasará el futuro de la odontología es la Inteligencia Artificial. Se podrá aplicar en casos como:

  • Una comunicación eficiente y automatizada con los pacientes. Por ejemplo, a través de un chatbot en la web que permita responder preguntas.
  • Ordenar, programar y cambiar citas con los pacientes de forma automática.
  • Detectar caries y enfermedades como el cáncer oral en su etapa inicial mediante radiografías.

Ya sea con una aplicación de gestión o con usos de diagnóstico, la IA permitirá reducir tiempos y gastos, ganando precisión y comodidad.

Escáneres 3D de alta resolución y baja radiación

Todavía hoy, muchas clínicas dentales siguen haciendo TACs convencionales para obtener imágenes de la boca de los pacientes. Sin embargo, este tipo de exploración mediante rayos X tiene los días contados, ya que existen tecnologías que permiten obtener imágenes más definidas, evitar problemas de artefacto y reducir la radiación.

Esta tecnología de la que hablamos se conoce como CBCT y es la que usa, por ejemplo, el escáner 3D Veraview X800 de Morita. Gracias a ella, se pueden tomar imágenes panorámicas de adultos y niños en pocos segundos, obteniendo una nitidez absoluta y una máxima seguridad para el paciente.

Un mayor foco en la esterilización y la purificación

Cada clínica dental tiene su propio protocolo de limpieza, desinfección y esterilización, regulado por el Real Decreto 1591/2009, de 16 de octubre, por el Ilustre Consejo General de Colegios de Odontólogos y Estomatólogos y por varias normas europeas. Evitar los contagios en la clínica por una mala praxis siempre ha sido un asunto muy importante para los profesionales del sector dental, pero desde la llegada de la COVID-19 todavía se ha puesto más el foco sobre la necesidad de esterilizar los instrumentos de forma efectiva.

La clave de una buena esterilización se encuentra en elegir correctamente el autoclave para la clínica y asegurarse de que funcionan correctamente. Por un lado, resultará cada vez más importante contar con autoclaves de calidad, como por ejemplo Supreme, de la marca Mocom, con conectividad a la nube, ahorro de agua y mecanismos para llevar a cabo la trazabilidad de cada ciclo. Por otro lado, en un futuro muy cercano será imprescindible que cada clínica cuente con sus propios indicadores biológicos para comprobar que los autoclave funcionan correctamente.

El peligro de la COVID-19 y otras enfermedades contagiosas que puedan aparecer no se encuentra solo en el instrumental clínico, sino también en el aire. Los aerosoles que se generan en cada intervención son peligrosos si cuentan con algún virus o bacteria infecciosa. Es por ello que otro de los aparatos que van a incorporar las clínicas dentales con más frecuencia serán los purificadores de aire y los aspiradores extraorales como Aspilaser, de la marca Cattani.

¿De qué se quejarán más los pacientes de una clínica dental?

Tal y como se habló en el I Foro Sanitas de Odontología, la periimplantitis es una de las candidatas a convertirse en la enfermedad dental del siglo XXI. Por esa razón, las clínicas tendrán que estar preparadas para realizar intervenciones milimétricas y eficientes. Uno de los aparatos que se convertirán en indispensables serán las sondas periodontales automáticas como la Pa On de Orange Dental.

Otro campo que sufrirá un aumento considerable de demandas en el futuro será el de la estética dental. Blanqueamiento dental, eliminación de manchas, modelación de la sonrisa gingival… aunque ya sean procedimientos habituales, está previsto que cada vez más pacientes lo soliciten.

Y tú, ¿cuáles crees que serán las tendencias en odontología del futuro? ¡Se abre el debate!